miércoles, 7 de enero de 2015

Breve reseña sobre un gran libro

"¿Por qué fracasan los países?"(“Why nations fail?"), así se titula el revolucionario libro económico más importante y actual a día de hoy. Escrito por Daron Acemoglu, profesor del Instituto tecnológico de Massachussets y James Robinson, profesor de Universidad de Harvard, quiénes resumen en el libro años y años de investigación y estudio.

Portada del libro "¿Por qué fracasan los países?"
Este libro enfatiza el uso de las instituciones extractivas en detrimento de las instituciones inclusivas, como la principal razón del fracaso –económico y político- de los países. Esta idea es radicalmente opuesta a las hipótesis geográfica, cultural y de la ignorancia.

sábado, 3 de enero de 2015

España dice no a la corrupción. La Guerra del Opio.


Palacio de la Ciudad Prohibida, Pekín.
Situación histórica muy recurrida, ya sea por sus consecuentes tanto como por su extraño y anecdótico motivo de guerra. Pues bien la Guerra del Opio fue aquel conflicto que defendieron China y Gran Bretaña durante los años 1839 y 1842. Como su propio nombre dice, el desencadenante de esta guerra fue el opio, una droga estupefaciente que por aquella época fue motivo de movimiento de inmensas cantidades de dinero y de muertes.

Podemos pensar ¿cuál fue la causa de empezar esta guerra? La causa principal fue la introducción en China de opio cultivado en la India pero comercializado por la compañía Británica de las Indias Orientales, la cual por esa época era la administradora de la India. Con tan sólo esta información nos resulta cuanto menos ridículo la situación de guerra por el comercio de opio, pero todo no es eso como podemos observar.

Hemos dicho que los encargados de comercializar el opio era Gran Bretaña, recordamos que esta nación disfrutaba de un papel hegemónico durante estos siglos a nivel tanto europeo como mundial, pero no siempre todo es tan bonito como parece, y en la historia no iba a ser menos. Resulta que China empezaba a “hacerle sombra” al papel hegemónico de Inglaterra, ya que estos cada vez producían más y más baratos productos y todos los países aumentaron sus importaciones de productos chinos, como también se vio obligado a hacer Inglaterra. Esta situación era desesperante, los “gigantes de la industria” se estaban viendo “pisoteados” por la nación China, esta realidad provocaba impotencia a la Honorable Compañía Inglesa de las Indias Orientales. La única solución para acabar con esto era vender un producto que fuera comprado en masas por los chinos, y así igualar las exportaciones con las importaciones, es aquí cuando se descubre el opio, el “oro inglés”. Los ingleses vieron en esta droga la salida a sus problemas y la vuelta al poder industrial que poseían desde la Gran Revolución, poco a poco los contrabandistas ingleses entraban en china con toneladas y toneladas de opio las cuáles generaban cada vez más adicción y por lo tanto más cantidad y más dinero. Los Gobernantes chinos al ver esta situación trataron de evitarlo, interceptando los cargamentos y deteniendo a los vendedores de esta droga, pero Inglaterra no iba a dejarse “pisotear” una vez más y optó por emprender toda una brigada militar a China, para vender libremente el opio en China, comenzando así la Guerra del Opio.  
Guerra del Opio, batalla naval (1841).
Como era de esperar, ya que las tropas inglesas eran de las más potentes del siglo XIX, la flota enviada por la Corona Británica derrotó a China. Como consecuencia de la derrota el emperador chino firmó el Tratado de Nanking, mediante el cual se dejaba libertad de comercio entre China e Inglaterra.

Hasta aquí llega lo que todos sabemos, las causas y consecuencias de una guerra, pero y España, ¿tuvo algún papel?, para sorpresa de muchos, sí, España perdió una oportunidad de oro con el comercio de opio. No fueron pocas las veces en la que se le dio la oportunidad a la sociedad española de realizar plantaciones de opio en Filipinas, recordando su proximidad directa con China, y a todas ellas España dijo no. España pasaba por duros momentos tanto económicos como políticos en aquella época, pasó de ser un país conquistador e importante a tener un mero papel pasivo en Europa, quizás la venta de opio y el hueco en el comercio Chino hubiera sido una solución próspera, a la vez que ilegal, para salir de esa pésima situación. 

Chinos fumando opio ilegal.
Por más que los historiadores recapacitan sobre esta negación al comercio de opio no encuentran una respuesta clara, varios autores culpabilizan de ello a la sociedad cristina que vivía en Filipinas la cual veía inmoral el comercio con drogas ilegales, otros simplemente a Gobierno de la época que no quería pasar por más casos de corrupción a los cuáles no podía hacer frente en esos momentos; aún así resulta difícil de entender. Con las condiciones tan favorables que tenía Filipinas se prevé que el Imperio Hispano podría incluso haber multiplicado las ganancias de los británicos una idea bastante beneficiosa para dejar escapar tan fácil.

Por último decir que las compañías que se dedicaron a la exportación de opio ganaron cantidades grandiosas de dinero, fijaros si es así que algunas compañías aún siguen vigente, gracias a la prosperidad económica que generaron por la ilegal pero excelsa venta de opio, de decir “SÍ” España ¿qué hubiera pasado? 

Águeda López Terrero.